Hace unos días se estrenaba el corto “Para” dirigido por Samuel Miró y protagonizado por Kira Miró y Alejo Sauras. Es la película de una violación en cita. No hay discusión. El personaje de Kira Miró le dice a su pareja de forma repetida y clara una palabra: Para; y lo hace con claros gestos para que el personaje de Alejo Sauras lo haga. Y no lo hace. Así son las violaciones en cita todo va bien hasta que la mujer dice que no, que pare. Y da igual que lo haga al principio de la cita o cuando ya haya comenzado la relación sexual. Parar es parar y no es no, no hay nada más que explicar. Por si hay alguien que le cueste entenderlo, sería inimaginable que yo entrara a un restaurante pidiera un chuletón para comer, comenzara a comer y decidiera que ya no quiero más, por lo que sea, me duele el estómago, no me está bueno, ya no quiero seguir comiendo, por lo que sea. Bueno, pues entonces llega el camarero o el cocinero y me obliga a seguir comiendo, me lo mete en la boca cuando le digo que no, que no quiero más. Si no lo entiendes, te lo voy a explicar con un video que lo explica muy bien, presentando una analogía muy parecida con la taza de te y las relaciones sexuales.

¿No es difícil de entender? ¿Verdad? Desde que has visto el cortometraje lo tienes claro, lo que se ve es una violación. Además, viendo el corto es muy fácil empatizar con la víctima, se describe su dolor claramente, dolorosamente. Pues, como pasa siempre que saltan noticias sobre la violencia hacía la mujer, el machismo o el feminismo, hay personas, en su grandísima mayoría hombres, que no lo entienden y que, en lugar de empatizar con el dolor de la víctima, empatizan con el agresor. ¿No te lo crees? Te lo voy a demostrar.

Pero antes quiero dejar claro un punto. No trato de darle publicidad y altavoz a esta jauría, igual que los periodistas que sacan a la luz los casos de corrupción no tratan de darle un altavoz a los corruptos. Se trata de darlo a conocer, de denunciarlo, de advertir que las violaciones y la violencia existen porque hay personas que piensan así.

 

Supongo que te habrás cansado de leer barbaridades y no has leído todos los comentarios Que nadie piense que me he tenido que ir a la Dark web para encontrar estos mensajes, los he encontrado en los comentarios del propio video y en los 3 primeros periódicos que he consultado la noticia. No he intentado ser exhaustivo en mi búsqueda, he cogido los primeros que me he encontrado. Junto con comentarios de agradecimiento a los autores del corto y exclamaciones de “basta ya”, aparecían este tipo de mensajes casi en la misma proporción.

Vamos a analizar, brevemente, no merecen más, algunos de estos comentarios. Están los que dicen que luchan por la defensa de las autenticas violaciones, se ve que en esto de prácticar sexo con una persona que no quiere tenerlo y te dice que no hay excepciones que permiten hablar de violación en unos casos y en otros no. Eso sí, esta gente se despreocupa de la victima en este caso. No parece muy sincero preocuparse de unas víctimas y no de otras.

Están los que defiende directamente que el consentimiento no tiene vuelta atrás, el consentimiento en el minuto 1, o en el 10, te obliga a seguir. No puedes cambiar tu decisión, es un contrato de obligado cumplimiento, aunque eso te lleve a tener que soportar que un hombre haga contigo lo que le de la gana. De este grupo, están los que utilizando, no sé si la poesía zafia o el humor asqueroso, se comparan con un Boing (dime de que presumes y te diré de lo que careces). El hombre no puede parar, en el sexo es un animal desbocado que no sabe parar. Supongo que si en la habitación entrase un hombre armado gritando que les va a matar lo haría, pero si es solamente la mujer la que dice no, son animales salvajes guiados por el instinto.

Y están los que culpabilizan e insultan a la mujer. Es una calientapollas, su único objetivo es calentar y abusar de los pobres machos, excitándolos para luego dejarlos a medio. Pobres hombres, no solo les hacen este tipo de cosas si no que están siendo victimas del feminazismo (que no existe), y de toda la gente que usa la lucha por la igualdad para conseguir dinero. El mundo se ha puesto en contra del hombre, somos las nuevas grandes victimas de la sociedad, no somos a los que nos matan y nos violan, pero somos las víctimas… vamos no me jodas.

Homofobia, misoginia, revictimización, violencia… justificaciones de la violación. Solo puedo añadir que escribiendo el artículo he pasado de enfado y de la indignación a la tristeza. Que asco de sociedad.