La noticia que he elegido para
esta semana posiblemente pase desapercibida para los medios de comunicación
españoles, al igual que ha pasado en años anteriores. Hoy celebramos el “WORLD
SMILE DAY”, una marca registrada por  Harvey Ball, el creador del conocidísimo “Smiley”. Este diseñador gráfico instauró
el 4 de octubre como el Día Mundial de la Sonrisa, así que desde 1999 propone
que tal día como hoy “hagamos un acto de bondad”, como pide el cartel oficial
del evento, y ayudemos a una persona sonriendo.

El smiley surgió gracias a una campaña interna de marketing de una
empresa en plena expansión para promover el
buen rollito y la amistad entre sus trabajadores, temerosos de ser
despedidos por una fusión empresarial. Ball cobró 45 dólares americanos por ese
trabajo, que según cuenta le llevo realizar diez minutos. Y luego la imagen
creció, se multiplico y se convirtió en un símbolo universal.

Necesitamos ideas positivas,
necesitamos buenas imágenes que nos provoquen emociones placenteras, que nos
haga ver el mejor lado de nosotros y de todo lo que nos rodea. Necesitamos más
sonrisas, así que hoy, un poco más que cualquier otro día, todo el mundo a sonreír.
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